Los niños son un 37% de las personas que han huido de Ucrania desde que comenzó la invasión de las tropas rusas, según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Sin embargo, miles de niños siguen atrapados en Ucrania. Ellos son los principales afectados de este conflicto bélico, y en especial, los huérfanos, quienes están viendo como sus hogares se convierten en refugios bajo tierra.
Como confirma UNICEF, Ucrania es uno de los países con las tasas más altas de cuidado institucional en Europa. Según la ONU, alrededor de 160.000 niños se encuentran bajo la tutela del Estado, y de ellos, 100.000 se encontraban en orfanatos cuando estalló la guerra.
Jesús Espinosa, periodista de Newtral, confirma que cientos de orfanatos han sido convertidos en búnkeres debido a los bombardeos. Niños sobreviviendo con colchones en el suelo y los recursos mínimos. “Hay orfanatos que se han quedado solos desde hace más de dos semanas, sin supervisión de ningún adulto. Los niños están solos. Nos tememos lo peor”, ha declarado Mónica Revilla, portavoz de Aldeas Infantiles SOS en Ucrania.
En un orfanato situado en la ciudad de Kovel, han convertido el juego del escondite en una manera de huir de Ucrania. El premio era `unas vacaciones en Polonia´. El objetivo del juego era llegar al autobús lo antes posible, y la sirena era la señal. «Igual que ellos tienen el objetivo de defender Ucrania, mi misión es salvar la vida de estos niños, que no tienen ni dónde estar, ni los cuidados de sus padres», asegura Halina Jowic, directora del orfanato.
Con este plan de huida, la fundación tiene como objetivo combatir la nueva arma de Putin, que consiste en reclutar a niños ucranianos en centros de reeducación.
Existen diferentes organizaciones y programas de educación como Save The Children, Aldeas Infantiles, Manos Unidas, etc., que ofrecen ayuda humanitaria con el fin de proteger a los niños. La Fundación Happy Kids ha ayudado a la evacuación de miles de niños ucranianos colocando autobuses en la frontera.